En el marco del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo que se celebra el 28 de abril, Santalucía ha acogido el Fórum de Organizaciones Saludables (FORSA). Se trata de un punto de encuentro entre empresas y expertos del ámbito de la gestión de las personas, la seguridad, el bienestar y la salud laboral.
Santalucía, como miembro de la Red Española de Empresas Saludables (REES) desde 2017, ha sido la anfitriona de esta jornada, que se ha podido seguir también online. La REES fue creada en 2013 por el Instituto Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo (INSTT), organismo oficial del Ministerio de Trabajo dedicado a este ámbito.
En su decimoctava edición, este foro ha sido inaugurado por Carmen Soler, directora de FORSA y Francisco Calderón, director de Relaciones Laborales de Santalucía bajo el título de “Empresas saludables: organizaciones espejo de la nueva era”. Durante la jornada se han analizado casos de éxito como el de la aseguradora. Mientras que Calderón abría el acto recordando “la importancia de crear entornos saludables en los centros de trabajo, donde las personas pasan un tercio de su vida”, Juan Carlos Sáez, gerente de Bienestar y Salud en Santalucía, ha explicado a continuación las medidas y acciones impulsadas para promover el bienestar de los trabajadores de la aseguradora, así como los resultados obtenidos.
En palabras de Juan Manuel Rueda, director de Personas, Organización y Comunicación del Grupo asegurador: “es un orgullo que FORSA haya elegido Santalucía como sede de esta edición. El foco son las personas, que son el eje central de nuestras organizaciones. En este foro abordamos la gestión de algo tan importante como es la salud desde todas las acciones y políticas que desarrollamos. Se trata de personas: de escucharlas, de atenderlas, y como me gusta decir, de enamorarlas”.
Las empresas son cada vez más conscientes de la necesidad de implantar programas que impacten de manera positiva en sus trabajadores, favoreciendo un entorno con las máximas garantías, no sólo de salud laboral sino de bienestar físico y emocional, que se ha demostrado, tiene efectos directos, en el aumento de la productividad, retención del talento, implicación laboral, motivación, creatividad e innovación.
El objetivo de las organizaciones debe ser elevar la calidad de vida de sus empleados, lo que implica asimismo contar con equipos más implicados, comprometidos y cohesionados. “En Santalucía nos preocupa el bienestar emocional de nuestros colaboradores y, entre otras muchas acciones, hemos puesto en marcha un programa de atención psicológica que llamamos A TU LADO, dirigido no sólo a nuestros trabajadores sino también a sus familiares directos, si lo necesitan. Así, todos los empleados y sus familias están a un click de su bienestar emocional”, ha explicado Juan Carlos Sáez de Rus, gerente de Bienestar y Salud de Santalucía.
Por su parte, la directora del Fórum, consultora estratégica de Bienestar y Bienser, Carmen Soler ha destacado que “tras la pandemia se ha incrementado el interés de las empresas por incorporar en su estrategia iniciativas innovadoras que permitan el crecimiento del bienestar y la salud de sus trabajadores, esforzándose por entender a los equipos desde su humanidad para lograr mayor felicidad y bienestar en sus vidas”.
El fórum ha contado con la mesa de debate “Conversaciones con empresas espejo”, en la que se ha abordado el cada vez más demandado por las nuevas generaciones “salario emocional”, que engloba todas aquellas buenas prácticas encaminadas a proporcionar mejores condiciones en el entorno laboral, así como la participación de Miqui Amador y Oliver Oliva, impulsores del podcast “El Club de los buenos días”, y que han contado a los asistentes cómo conseguir mayor felicidad emocional con el “Mindfulness para aliviar el estrés y la ansiedad con amor y humor”.
La intervención final corría a cargo de Marisa Salanova, Doctora en Psicología y Catedrática de Psicología Social y autora del libro “Resiliencia”, que ha analizado la autorregulación emocional, el uso de las fortalezas del carácter, las creencias de autoeficacia, el optimismo, y la creación de una red de apoyo social nutritiva.